¿Hay algo malo en prestar atención a las cosas bonitas y admirar lo bonito que son los objetos materiales? ¡Descubre por qué deberías parar y comenzar a celebrar tu vida cotidiana!
El enfoque minimalista de la vida promovido en los últimos años nos obliga a poseer menos cosas. Esta tendencia, sin embargo, hace que a veces sintamos incluso remordimiento por disfrutar de cosas bonitas. !Este es un gran error!
En primer lugar, digámoslo claro: ¡no hay nada de malo en el hecho de que nos gusta rodearnos de cosas bonitas! El enfoque minimalista de la vida nos anima a tener menos cosas, sin embargo, no nos impide disfrutarlas. Al contrario, nos anima a rodearnos de belleza y calidad. ¿Por qué?
Calidad y estética: elige solo cosas realmente bonitas
Está comprobado (tienes que admitir que lo has notado): rodearse de cosas bonitas tiene un efecto positivo en nuestro estado de ánimo y, por lo tanto, en nuestra actitud ante la vida. ¡La belleza de los objetos cotidianos que nos rodean puede incluso determinar cómo percibimos la calidad de nuestras vidas! Sin embargo, en ningún caso debes avergonzarte de apreciar la buena calidad de los objetos cotidianos o la belleza de las obras de arte. Es maravilloso que seas una persona sensible a la belleza. ¡Permítete ser un esteta!
Celebrando la vida cotidiana
Nunca debes dejar que tu vida se convierta en una expectativa constante de momentos sublimes. No podemos vivir solo de un momento sublime a otro. Si nuestras vidas son sobre todo lo que hay entre ellos. Intenta vivir plenamente aquí y ahora. Aprende a celebrar tu vida cotidiana. Cuida los detalles de las actividades cotidianas.
¡La belleza de cosas que te rodean todos los días puede hacerte vivir mejor! Así que aprende a aprovechar cosas bonitas. Disfrútalas. Deja de guardarlas para momentos más importantes. Comprende que , sobre todo, tú eres importante, aquí y ahora. Usa los objetos que te dan alegría en estos «días ordinarios», ¡porque no puedes guardar la alegría de la vida solo para ocasiones especiales! Cualquier actividad diaria, incluso la más pequeña, celebrada como Dios manda puede convertirse en un gran evento. ¡Domina este arte y comienza a disfrutar de las cosas pequeñas! Incluso un buen baño puede limpiar tanto tu cuerpo como también tu alma…
¡El té preparado en tu taza favorita siempre sabe mejor! Rodearse de objetos bonitos y equipos de alta calidad, sin duda te permitirá celebrar plenamente la vida cotidiana. Así que cuida tu mesa todos los días, no solo de vez en cuando.
Apuesta por la calidad, no por la cantidad
El exceso puede abrumar. ¿Tienes problemas con la concentración y con frecuencia te cansas? Eliminar objetos innecesarios que acumulan polvo y dejan mucho que desear, te permitirá sentirte liberado. En una habitación minimalista descansarás de manera más eficiente. Tu concentración mejorará y por fin encontrarás paz y armonía. En lugar de cantidad, debemos apostar por la calidad.
Al utilizar productos de buena calidad, podremos disfrutar de su uso. Las cosas materiales nunca deberían convertirse en una prioridad en nuestras vidas. Sin embargo, si podemos permitirnos, deberíamos comprar equipos y decoraciones que nos gusten. Podemos rodearnos de belleza y calidad sin sin dañar el presupuesto. Hay que ser listo. No se trata de reemplazar todos tus electrodomésticos, accesorios y decoraciones por otros nuevos de inmediato. ¿A lo mejor te gusta el DIY y puedes dar nueva vida (y nueva calidad) a artículos que no te han gustado hasta ahora? ¿O tal vez puedes crear decoraciones hechas a mano para tu hogar desde cero? Si te hace feliz, también puedes buscar tesoros en el mercado de pulgas o cómprate una cosa nueva y bonita cada trimestre.
Cuida los detalles de la vida cotidiana
Seguro que tienes algunas cosas bonitas que te da pena sacar de de la caja… Intenta usar las cosas cotidianas que ya tienes y las que te gustan. Rodéate de objetos bonitos para que te den alegría. Utilizándolos, intenta parar por un momento … ¡Disfruta de rodearte de cosas hermosas!
Aprende a disfrutar del aroma fresco de las toallas y las sábanas sacadas del cajón. Toca la tela y siente su olor y suavidad, siente su textura. Aprecia la belleza de las cosas en todas sus dimensiones.